Pero Tomoe, ¿como tú de vuelta? pues ya ves, que ante las adversidades me crezco y si de normal hablo, ahora aún me da por hablar más. Hay un dicho popular que dice que si se cierra una puerta, se abrirá una ventana. Fijate yo creo que en esta ocasión el portazo ha hecho reventar los cristales de todas las ventanas para dejar pasar a un aire fresco, renovado y diferente.
Y no, no estoy hablando del notición del verano de si toros si o no, estoy hablando de emociones, de sentimientos y de que al final lo que queda son las personas y, en esta ocasión, esa persona ha dejado mucho que desear. Y que conste, que gracias a esa gran «hostia» hemos despertado cual letargo invernal porque no todo es lo que se nos cuenta y no, no todo vale.
Vale seguro que estaréis pensando que se me ha ido la cabeza. Puede que igual sí pero bendita locura que me ha hecho ver más allá y entender que la palabra lealtad solo es válida para personas que creen verdaderamente en ella y no tienen cara A y cara B. Y si, se que seguro estarás leyendo esto y pensando en lo mala que es la Tomoe, pero mira ¿sabes que te digo? que puedo ser peor si me lo propongo pero en este caso y, a pesar de todo, he de reconocer que me gusta la mortadela y volar cual «aguililla» por el aire. Solo espero que el viento guíe tu barco hacía otras aguas lejos de éstas porque sino, mi voz no se callará…
Y después de soltar esto que me estaba ulcerando, no puedo dejar la oportunidad para agradecer de nuevo a Sillas José y a la Junta Central de Fiestas que este año vuelva a tener tribuna con mis colegas de fiestas y eso que ni siquiera tengo fibra óptica ni hice cola ayer para el reparto de bocadillos. No hay nada como tener amigos, y enemigos, en cualquier lugar del mundo ¿verdad?
Pero eso sí, y lo contenta que estoy que por fin voy a sacar mi peineta y el pañuelo blanco para irme a ver a los toreros (que no a los toros) el día 7. Un aplauso a los taurinos por su paciencia (que la han tenido), ellos si son merecedores de una insignia de oro de la ciudad por su tesón y por no cesar en su empeño, puede que se haga realidad aunque, también cabe la posibilidad de que no… Porque no se necesitan los mismos permisos para una comida que para una corrida (en eso estos del psoe tienen razón).
De la que no dejo de pensar es en la pobre Esther, con todo lo que ella ha luchado para que los toros, y los toreros, no volvieran a Villena. Ella que es capaz de cuidar a un verdejo o a una manada de gatitos se ve ahora con sangre en las manos… yo de ti Esther me iba de Villena el 7 así ¡Ojos que no ven corazón que no siente!
Eso sí, la tensión se siente en el ambiente, esa tensión entre rojos y verdes que se puede cortar (o explotar) de un momento a otro. Y es que no nos damos cuenta de que esto puede crear una brecha entre este pacto silencioso de gobierno. Y que los azules y los naranjas andan frotándose las manos como Aladín a la lámpara a ver si, sale el genio, y aún rascan algo para esta legislatura. porque ¿siguen estando aunque sea en la oposición no?
Yo por si acaso, me voy a desempolvar mi bata de cola que me he venido arriba y éstas fiestas prometen.
¡Felices fiestas a todxs!!