Myriam y Jordi son una joven pareja que contrajo matrimonio el pasado 6 de agosto en Girona. Hasta aquí todo normal. No es noticia, pensaréis muchos de vosotros. Pero Myriam y Jordi no eligieron para su luna de miel una playa desierta, ni la Riviera Maya, ni República Dominicana, Cuba o las Islas Seychelles. Lo tenían muy claro desde el principio. Su viaje de bodas tenía un destino claro: Villena, y el ‘Leyendas del Rock’.

ÁGORA HABLA se puso en contacto con la novia, Myriam, una rockera hasta la médula, amante de ‘Doro’. Ella canta en un grupo de heavy metal, y han tenido la ocasión de viajar hasta Villena gracias, en parte, a Aleix y Roser, sus padrinos.

«Nos regalaron el viaje, y lógicamente a dos amantes del rock y el metal como nosotros, no pudimos decir que no», apunta esta gerundense. Así que, con ellos y un amigo más «acabamos en Villena, en el festival más importante en España. Nosotros jamás habíamos estado en el Leyendas, pero íbamos acompañados de dos grandes veteranos: Aleix y Roser. Ellos llevan asistiendo desde el primer leyendas y nos han podido explicar la evolución del festival y muchas ‘Leyendas’ de todos los festivales», manifiesta.

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Tanto Myriam como Jordi se quedaron encantados del montaje y la organización existente en el festival. «Cuando llegamos, y sabiendo lo que nos habían explicado, nos encontramos con tres zonas de acampada: libre al sol, privado al sol y vallado en la sombra, con seguridad privada, zona de comida variada, duchas, baños… (quizás los baños se podrían mejorar el año que viene, pero habían muchos, por zonas y sin mucha cola, y según la hora, un poco sucios).

Los novios eligieron la zona de sombra para acampar. Llegaron el miércoles, para poder presenciar la jornada gratuita. «No había suficiente zona para las entradas vendidas, todo un fallo para los que se tuvieron que quedar en el sol, aunque he oído que la organización puso solución», apunta Myriam, que también elogió la zona de acampada de la Piscina Municipal: «También habíamos reservado la piscina, un lujo, en una zona tan calurosa, pero con aforo».
Pero sobre todo, tanto para la pareja como para sus compañeros de viaje, se llevaron una grata impresión de Villena, y de sus ciudadanos. «La verdad es que Villena es precioso y su gente muy simpática y cercana. No parecían molestos por ver a tanto heavy por sus calles. Todo lo contrario, super agradecidos y amables».
En cuanto a la organización del ‘Leyendas del Rock’, Myriam manifiesta lo siguiente: «Impresionante. Tres escenarios, dos grandes y uno pequeño, con pantallas, césped, tiendas de ropa y accesorios, comida, y como no ¡una gran barra!, y otra pequeña, zona para minusválidos, etc…».

«Es verdad que la zona de entrada fue un poco caótica. Quizás deberían preverlo mejor para año que viene, aunque cuando descubrimos que con el pase de piscina entrábamos más rápidos, ya no nos tocó hacer más colas», manifiesta la recién casada.
Pero hablemos de música, que es lo que realmente importa. «Con tanto escenario no pudimos ver todas las actuaciones. Puedes elegir los que más te gusten o curiosear entre bandas no tan conocidas, pero no menos importantes. Bandas excelsas y de cartelera, en las que no puedes fallar como Helloween, Anthrax, Avantasia, Children of Bottom, Warcry, Tarja, Steel Panther, entre otras, estuvieron a la altura de lo que se esperaba y si se esperaba otra cosa es que no los habéis visto suficientes veces en escenarios», apunta Myriam.
Pero la gerundense, y como buena entendedora de la materia, también tiene palabras de elogio a otros grupos: «Las demás bandas que no he mencionado en los escenarios grandes, como Dark Tranquillity, Powerwolf o Nazareth, que no había tenido el placer de ver en concierto, estuvieron a la altura de tal dimensión de escenario y público entregado. ¡Me sorprendieron mucho!».

«Me sorprendió que Dare estuviera en el escenario pequeño y a la misma hora que Helloween. Me los perdí. Una pena. Aún gracias que pude ver a Legion The Damned, grandes monstruos en el escenario, entre otros muy buenos»; señala Myriam, que ya está pensando en ahorrar para poder repetir el próximo año.

«Finalizamos la experiencia con un gran sabor de boca y con ganas de repetir. Y más cuando te van anunciando los grupos confirmados para el año que viene. Ya se nos hace la boca agua. ¿Qué si repetiremos? ¡No cabe duda en que volveremos!». Y nosotros estaremos encantados de conoceros en persona y de contarlo. Larga vida al rock.

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