Todo transcurria con normalidad en la 3º edición de los Autoachos, hasta que aparecieron loa Madrinos, guiados por un conductor temerario, con brazos tatuados, gafas sin graduar y fumandose un puro mientras conducía, estuvo apunto de provocar una catástrofe.
En una tarde soleada, donde los Madrinos decidieron embarcarse en la aventura de los autoachos, nadie se esperaba un viaje lleno de incidentes. Los Madrinos iban disfrutando de su viaje tranquilamente…
Pero el imprudente conductor, con su baja visibilidad por el humo del puro que fumaba mientras conducía, no giró a tiempo en una de las curvas mas peligrosas del circuito y…
Gracias a la colaboración del publico los madrinos ni se tuvieron que despeinar consiguiendo sacar la carroza del atasco de ruedas, el conductor consiguió llevar a los madrinos a su destino y todo quedó en un pequeño susto…
Aquí las fotos de todos los participantes.