Sin querer entrar en
valoraciones sobre gustos, que para eso ya están los colores, como
grupo municipal representante de un partido que ha luchado y lo sigue
haciendo constantemente por la igualdad real entre hombre y mujeres,
debemos de lanzar a la opinión pública una reflexión sobre los
arcos que este año van a iluminar nuestras fiestas de Moros y
Cristianos y sobre lo que en nuestra opinión están representando.
A poco que observemos la
“novedosa” iluminación que desde la concejalía de fiestas se ha
elegido para estos días(sin conocer el coste económico todavía),
veremos como unos señores cariacontecidos, muy serios y con aires de
grandes guerreros triunfadores presiden ese “cielo” luminoso que
acompaña el recorrido de todos los desfiles.
Solo señores, solo reyes
guerreros, ni rastro de lo femenino, ni un simple guiño a las muchas
mujeres guerreras que ha dado la historia, ¿la fiesta es solamente
en recuerdo de hombres guerreros?
Es cuanto menos llamativo
y totalmente contradictorio, (aunque marca de la casa), que dentro
del grupo de concejales y concejalas Verdes que forman el equipo de
gobierno se realicen actuaciones dispares y sin sentido de la
globalidad en cuanto a las directrices que como tales deberían de
haber establecido. Pues si desde la concejalía de igualdad se ha
traído la aprobación de un Plan de Igualdad y Felicidad, que
necesitó de un trabajo de adecuación llevado a cabo entre todos
los grupos políticos con representación municipal, ahora ningunos
de los concejales y concejalas verdes ha reparado en esta situación
paradójica que se está ofreciendo.
Nos crea igualmente
confusión, que un equipo de gobierno Verde, que ha ante puesto el
nombre del “regidor” al de “regidora” en las bases para la
presentación de candidaturas a este cargo, que ha realizado
renombrado calles colocando el nombre de mujeres, (acciones que hemos
apoyado y seguiremos apoyando), esté ahora callado aceptando esta
desafortunada elección totalmente arcaica en tiempo y forma, que a
nuestro parecer, ni refleja la diversidad de nuestras fiestas,
tampoco nuestro modo de vivirlas y de entenderlas, ni mucho menos la
obligación de los gobernantes de procurar que la igualdad se de en
todos los gestos, acciones y decisiones que se tomen desde esa
condición de dirigentes públicos, sobre todo cuando se pertenece a
opciones políticas que hacen bandera de esta lucha y se la creen.
En nuestra ciudad, las
fiestas pasadas, pudimos ver desfilar a una mujer capitana de su
comparsa, en la presentes veremos a una mujer alférez de la suya que
portará orgullosa su bandera, y en la próximas veremos a niñas que
se van a incorporar a estos cargos con total naturalidad, tal y como
debe de suceder en una sociedad igualitaria e integradora y en unas
celebraciones que son de hombres y mujeres a partes iguales en todos
los sentidos.
Es por ello que desde el
grupo municipal socialista, consideramos que este año tenemos unos
arcos estereotipados en la masculinidad, a la vista están. Desde el
grupo municipal del PSOE consideramos que Villena como ciudad y sus
fiestas como manifestación cultural, han avanzado mucho en la
integración gracias al esfuerzo de todas las mujeres que pelaron por
ello y de todos los hombres que consideraron que esa lucha era justa
y necesaria, para que este año 2018 sean únicamente imágenes
masculinas las que se paguen con dinero público y cobre un
protagonismo al ser parte importante de la puesta en escena de las
celebraciones mas multitudinarias de la ciudad.
Porque los pequeños
detalles son importantes, y aunque este tema pueda parecer una
nimiedad, consideramos que no es bueno como mensaje que las imágenes
de muchos de los arcos luminosos de estas fiestas hayan olvidado a
las mujeres, a las actuales que desfilaremos como festeras y a las
pasadas que también fueron heroínas en las luchas Moro/Cristianas y
lo cuestionamos porque son mensajes subliminales y patriarcales que
deberían de ser evitados desde lo público máximo cuando se pone
tanto énfasis y presupuesto en instar a la sociedad villenense a
practicar diariamente la igualdad, la diversidad y la felicidad como
modo de vida y de pensamiento. El ejemplo se da con el ejemplo.