El robot interactivo Pepper ha realizado su primera práctica fuera del campus de la Universidad de Alicante junto a los usuarios de la residencia para la tercera edad Doña Rosa. Diseñado por el Grupo de Robótica y Visión Tridimensional (RoViT) de la UA, Pepper ha causado una auténtica revolución entre los residentes que no han dudado en acercarse para realizar distintos ejercicios físicos.
Dotado con un complejo sistema de cámaras, una tablet y sensores basados en inteligencia artificial, el modelo comercial Pepper es capaz de evaluar y corregir la actividad física, guiar al usuario y facilitar así el envejecimiento activo de la población. “El objetivo es llegar a desarrollar un software tan completo que permita convertir a Pepper en un asistente personal para el hogar preparado para monitorizar a usuarios dependientes o con discapacidad”, señala Ester Martínez, investigadora del Grupo de Robótica y Visión Tridimensional de la Universidad de Alicante.
Para el gerente de Doña Rosa, Claudio Lloret, es imprescindible adaptar las nuevas tecnologías a los servicios y actividades que se ofrecen en el centro. “Queremos una residencia del siglo XXI”, explica. “Para los residentes es un estímulo contar con un asistente como este robot interactivo y para cuidadores y asistentes es una herramienta muy útil que completa nuestro trabajo”, señala la fisioterapeuta de la residencia, Cristina Valentín.
El desarrollo de Pepper forma del proyecto Pharos en el que participan investigadores de la Universidad de Alicante, Universitat Politècnica de València y la Universidade do Minho de Portugal.
