Sorprendidos, extrañados, asombrados incluso, nos encontramos desde el Partido Popular, al descifrar el comunicado emitido por la asamblea verde, titulado “Participación ciudadana”. Un discurso cargado de marketing político, donde se ensalzan ciertos principios que, hoy por hoy, carecen de sentido al ver la forma de gobernar las instituciones en nuestra ciudad. Enunciados demagógicos desprovistos de valentía, que intentan maquillar actitudes y aptitudes, al no ser capaces de asumir la realidad política en nuestra ciudad.
Y esta no es otra, que una mayoría absoluta verde mal entendida, que no está siendo gestionada adecuadamente, aplicando “ocurrencias” con su rodillo. Formas unilaterales de gobernar, obviando opiniones y sugerencias, tanto de partidos políticos de la oposición como de otros agentes. Muchos son los ejemplos, como los presupuestos municipales y las plantillas de personal, externalizaciones de servicios municipales, aplicación de políticas paternalistas en materia de igualdad, ordenanzas reguladoras de ocupación de vía publica de mesas y sillas, políticas animalistas, etc.…
Un discurso ideal el que predican, pero que no llevan a cabo en la toma de decisiones. Cabría recordar en este punto, que todas esas medidas afectan a todos los villeneros y villeneras, y no solo a aquellos que les votaron. Siguen comentando en su comunicado, que uno de sus principales puntos ideológicos es la participación ciudadana como presencia en el modelo de ciudad que queremos. Un enunciado que no se ajusta a la realidad, pero que queda muy bien cara a la galería.
Desde el partido popular venimos observando y hemos denunciado como en patronatos, agrupaciones y fundaciones, se han producido importantes bajas voluntarias por motivos personales, que merman la participación ciudadana en organismos que, hasta la fecha, han sido multidisciplinares y democráticos. En estos momentos, seguimos esperando esas renovaciones. Esperemos que sean para bien y que vayan en “pro” del interés general.
Añaden también en dicho comunicado que, según se recoge en su reglamento interno, se apuesta por una “ineludible regeneración democrática y la dignificación de la política”. Observamos como desde su propio egoísmo, solamente se intentan dignificar ellos mismos. Ya que, pleno tras pleno municipal, traen mociones tipo con discursos típicos de Compromís y Podemos, cargados de odio y resentimiento, sembrado la duda sobre la honestidad y la capacidad de los grupos municipales de la oposición. Como si ellos mismos, no pertenecieran a la clase política, a esa “casta”, de la que tanto reniegan y a la que denigran cada vez que tienen ocasión.