Enésimo capítulo del uso del glifosato. Tras la comparecencia de Fulgencio Cerdán, secretario general del PSOE de Villena, ante los medios de comunicación para denunciar que el consistorio seguía utilizando glifosato, aportando facturas posteriores a la aprobación en pleno del no uso de este herbicida cancerígeno, José Tomás Molina, concejal de Medio Ambiente, se ha presentado hoy en la sala de prensa con uno de los dos bidones que el ayuntamiento compró, «por error», tal y como ha señalado.

Molina se mostró irónico al afirmar que «me parece fantástico que el PSOE se erija como defensor de la no utilización de este herbicida, pero me hago una pregunta: En abril se llevó a cabo un pleno en el que presentó una moción para que se dejara de utilizar el glifosato. ¿Por qué el PSOE no votó a favor de esta moción? Ahora sí que vienen a culparnos de hacer uso de un herbicida que lleva este compuesto. ¿Dónde está la demagogia, señor Cerdán? La OMS (Organización Mundial de la Salud) ha calificado al glifosato como cancerígeno, pero no aprueban la moción, por lo que entiendo que están a favor de utilizar este herbicida».

José Tomás Molina explica que se compró el herbicida por error. Asegura que desde hace cuatro años las brigadas que actúan en las zonas verdes no usan productos que contengan el glifosato, aunque hay dos lugares en el que se ha tenido que utilizar, «en el yacimiento de Cabezo Redondo y en la explanada de la depuradora de las Virtudes», apunta el edil.

Éste ha explicado el por qué del uso de Winnercoop: «En el cabezo, los muros del poblado ibero estaban poblados por arbustos de crecimiento potente. Debido a la fragilidad de los mismos, los técnicos de las excavaciones nos apuntaron que no se podía desbrozar la zona. Tampoco podíamos utilizar métodos mecánicos para ello, por lo que usamos finalmente el glifosato. Yo lo permití dos o tres veces en tres años».

En lo que a la explanada de la depuradora de las Virtudes se refiere, «cuando obtuvimos esta instalación hace dos años y medio, vimos que la depuradora estaba escondida debajo de abundante broza. Se hizo de manera manual, y aplicando este herbicida. Por lo que desde la aprobación de la moción no se ha vuelto a utilizar el glifosato», añade Molina.

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Las facturas mostradas por el PSOE

Sobre las pruebas que aportó Fulgencio Cerdán de que el consistorio había adquirido un herbicida que llevaba un 30 por ciento de glifosato, factura con fecha 15 de abril, es decir, una vez aprobada la moción de no uso, «todo se debe a un error, ya que el capataz de las brigadas estaba de baja por enfermedad, y se compró dos bidones de Winnercoop, que contiene glifosato. Una persona de la brigada firma la factura sin conocer el producto», apunta.

No obstante, Molina asevera que una vez que se enteró que ese herbicida llevaba una composición de glifosato, devolvimos una garrafa, y la otra, que es la que se encuentra aquí, al estar abierta, no la hemos podido devolver. Está prácticamente llena, y se quedará bloqueada para que no se use».

Según el concejal, Fulgencio Cerdán «hubiera hecho mejor las cosas si antes de salir en la prensa, de una manera sensacionalista, me hubiera consultado. Yo le habría explicado todo esto. Pero nosotros somos coherentes y consecuentes. Podemos tener fallos humanos como este. Todo no se puede controlar. Pero si esta es la manera de hacer oposición, mejor que la hagan de otra manera».

Molina ha hablado de otros herbicidas potentes y que no contengan glifosato. Están estudiando la utilización de ácido acético, ácido metilcarboxílico o ácido etanoico, que se puede
encontrar en forma de ion acetato. Éste es un ácido que se encuentra en
el vinagre, siendo el principal responsable de su sabor y olor agrios.

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