El Belén Monumental abre sus puertas en el 50 aniversario de la Asociación de Belenistas de Villena
Mila Murillo, acompañada de la Sociedad Musical Ruperto Chapí, abrió los actos de Navidad con su pregón sobre el escenario del Salón de Actos de la Casa de la Cultura en la que glosó sus sentimientos y experiencias personales de estos días del año tan especiales. La empresaria y cooperante internacional emocionó al público con su Pregón de Navidad, una intervención que sirvió de preludio a la inauguración oficial del Belén Monumental, que conmemoraba el 50 aniversario de la Asociación de Belenistas de Villena.
La concejala de Cultura, María Server, apuntó en su intervención que “la Navidad no solo es un tiempo de regalos y luces brillantes, sino también una oportunidad para reflexionar sobre el año que ha pasado, mostrar gratitud y fortalecer nuestros lazos comunitarios”. Para Server, “nuestra pregonera nos recuerda la importancia de la solidaridad y la compasión. Es un ejemplo a seguir para extender nuestras manos hacia aquellos que necesitan apoyo y amor”.
Tras el pregón, el alcalde de Villena, Fulgencio Cerdán, señaló que “la Navidad ya está aquí, Mila Murillo ha abierto las puertas y ventanas y, con todas su fuerza y su alegría, un raudal de navidad ha inundado Villena, cada casa, cada familia, a cada persona, a los que estamos aquí en la Casa de la Cultura, como a los que están fuera en sus cosas”.
El alcalde destacó de la pregonera que nos “demuestra que cuanto peor están las cosas, más confianza debemos tener en nosotros mismos, en nuestros valores y en la defensa de la justicia, la solidaridad y la paz. Sobre todo, en la paz. Paz para nosotros mismos, paz entre nosotros mismos, en este país y en el mundo entero. La paz es el camino hacia la concordia, el encuentro y el diálogo que nos abre a las soluciones de todos y cada uno de los problemas”.
Cerdán concluyó con la afirmación de “damos por encendida la Navidad, damos por iluminados estos días, que brille para todos, sin que nadie tenga la necesidad de apagar bombillas ajenas, que seamos libres, que seamos felices y que seamos un poco Mila Murillo”.