Sobre las décadas de los 80 y 90 en la zona de los cabezos de Villena se
vislumbraron seres extraños, unos seres imposibles de catalogar para la
ciencia, incluso algunos testigos han llegado a ver hasta criaturas
mitológicas, es como si en dicha zona hubiera alguna especie de magia o
algo sobrenatural.
«El gigante de lodo»
Diciembre 1992.
Como en todas la épocas han habido distintos niveles sociales, en este caso el
relato va sobre una familia muy pobre, la pareja buscaba chatarra para
venderla y sacar algo de dinero para sus hijos, de alguna forma u otra
tenían que buscarse su propio sustento.
Un conocido de este matrimonio les comentó que en una zona de Los
Cabezos se arrojaban trastos que otras personas dejaban allí cerca de un
antiguo vertedero, le dieron las gracias y en esa misma tarde marcharon
hacia el lugar.
Llegaron con su coche destartalado al lugar, eran sobre las seis de la
tarde y el sol iluminaba muy poco. Empezaron a buscar cobre de los
enseres que allí habían.
Cuando llevaban ya unos 15 minutos, de repente
parecía como si el sonido ambiente y el viento desapareciese, un extraño
silencio que incluso era molesto, tan solo se escuchaban sus pisadas y
sus respiraciones. La pareja se miraron a los ojos como si supieran lo
que les iba a suceder a continuación.
De la parte baja de la pequeña ladera se empezaron a escuchar unas
extrañas pisadas, el sonido era como si llevaran unas botas de agua
empapadas. Sus corazones empezaron a latir con fuerza, tenían el
presentimiento de que algo no iba bien, los pasos cada vez se escuchaban
más fuerte, los dos se estaban echando hacia atrás.
¡Era algo enorme,
tenía forma humanoide, estaba lleno de lodo, pero de un tamaño
impresionante, medía alrededor de 3 metros! Esa cosa se quedo quieta
observandolos, la pareja estaba en estado de shock, les llegó también un
apestoso hedor que les ahogaba. En cuanto recuperaron el sentido
huyeron tan rápido como pudieron, ¿era una pesadilla, o alguien les
quería gastar una especie de broma? eso es lo primero que se les pasó
por la cabeza. Cogieron el coche y nunca más fueron al lugar, para ellos
esa zona tiene algún tipo de maldición.
«El ave azabache»
El siguiente relato es corto pero muy interesante.
Corría el mes de Agosto del 1998, un hombre que actualmente tiene una casa en ese lugar vio algo que nunca podrá olvidar.
Era una calurosa tarde cuando empezó a escuchar el graznar de una manera
un tanto molesto de las aves del lugar, se asomó por la ventana y había
una especie de sombra que iba de un lado para otro. abrió la puerta de
la casa y miró al cielo, ¡era un ave de proporciones gigantescas y negro
como el azabache! pasó por encima de la casa y parecía como si
estuviera de caza, sus movimientos circulares eran muy parecidos a los
que hacen los buitres.
El hombre apresurado buscó su vieja cámara de fotos, pero llegó demasiado tarde, el ave desapareció y jamás se volvió a ver.
¡Próximamente la 2ª Parte!