La
pasada semana, desde el PSOE anunciamos la presentación de una
propuesta a la Junta de Gobierno Local en la que solicitamos el
cambio de destino de la inversión denominada por el edil Antonio
Pastor como “pulmón verde”. Una denominación de la que parecía
renegar el propio alcalde en su comparecencia del pasado viernes.
Recibida
la semana pasada la convocatoria de la Junta de Gobierno para el
presente lunes, comprobamos con sorpresa que no aparecía la
propuesta del Partido Socialista. No había sido incluida en el orden
del día por el alcalde. Algo que hasta ahora no había ocurrido y
que denota el autoritarismo con el que está actuando la primera
autoridad local, ya que ni tan siquiera da la oportunidad a la
oposición de debatir una propuesta en el seno de la Junta de
Gobierno. Lo que sí que aparece es un decreto firmado por Javier
Esquembre, a espaldas del resto de grupos políticos, donde se
decreta la ubicación de la inversión en el polígono.
Su
justificación pública ante la propuesta del cambio de sitio
realizada por el Partido Socialista resulta ridícula y falsa. El
primer edil afirma que “ni el PGOU lo permite ni el ayuntamiento
cuenta con terrenos para ello”. Pero lo cierto es que existen otros
espacios dentro del casco urbano en donde se puede incrementar la
masa arbórea y también existe la posibilidad de modificación del
PGOU. Es más, si el planteamiento inicial era en la zona del Grec,
ha habido tiempo más que suficiente para proponer la modificación
de uso del suelo, algo que tampoco han hecho desde el equipo de
gobierno Verde.
Cabe
también destacar, que el error de origen es del equipo de gobierno
cuando plantea el desarrollo del parque en la zona del Grec. Aquí
también existen versiones contradictorias entre Pastor y Esquembre
para rechazar la primera ubicación. Mientras
el primero dice que es un problema de permisos de la Generalitat
Valenciana, el segundo afirma que es un problema de calificación del
suelo. Ni tan siquiera se ponen de acuerdo en la excusa.
Pero esto no es la primera vez que pasa. En el año 2017 ya planteó
el equipo de gobierno realizar un parque canino en unos terrenos que,
entre otras cosas, no lo permitía el PGOU, y tras la denuncia del
PSOE hubo que cambiar de ubicación.
Cuando
Esquembre afirma que “nunca se definió un lugar concreto para el
proyecto, que su objetivo principal no era crear un parque, sino
aumentar la masa forestal de la ciudad”, al primero que desmiente
es a su concejal de Medio Ambiente, puesto que en sus declaraciones
del 27 de diciembre el edil afirmó textualmente que “esta
actuación supondría la creación de un pequeño parque, con la
instalación de bancos y arbolado”.
La
hemeroteca una vez más demuestra el descontrol, ineptitud y falta de
un modelo claro de ciudad del Partido Verde. Un día se levanta
queriendo hacer un parque con instalación de bancos y arbolado en el
Grec. Al día siguiente el parque se traslada al polígono. Y dos
días más tarde el parque se transforma en la plantación de unos
cuantos árboles.
A
pesar de las declaraciones vertidas por el primer edil, a los
socialistas nos sigue pareciendo una falta de respeto a todas las
personas que se involucraron en el proceso participativo en el que se
analizó y votó este proyecto. Los Verdes aún están a tiempo de no
dejarse llevar por motivos electoralistas, invirtiendo el dinero de
todos los villeneros y las villeneras en una zona más óptima para
que esos 46.000 euros no sean un despilfarro malgastado. Para eso ya
aguantamos durante años las políticas del Partido Popular.
