Miguel Ortuño, presidente de la Peña Cultural Taurina Villenense ha comparecido ante los medios de comunicación para, una vez más, reivindicar las corridas de toros en la ciudad, y, además, anunciar un más que posible contencioso administrativo ante el oscurantismo del equipo de gobierno, «y más en concreto del alcalde», a la hora de cumplir con el reglamento de uso de la Plaza de Toros.
Ortuño ha indicado que «nuestros abogados ya tienen toda la documentación, y estamos a la espera de recibir, de manera legal, el acta de la comisión de seguimiento», a pesar de que ya la tiene en su poder la peña taurina, «pero no es la oficial», ha declarado.
El máximo dirigente de la Peña Cultural Taurina Villenense ha tachado al alcalde de «maleducado por naturaleza, mentiroso y no atiende a la ciudadanía». Ortuño se ha quejado del estado de la Plaza de Toros. «Hay goteras en su interior, no existe desagüe alrededor del coso y mantiene cerrada la pirámide, sin sacar rendimiento alguno». Además, califica a Francisco Javier Esquembre de «iluminado», ya que según Ortuño, «el alcalde dice que no se debe de organizar ninguna corrida de toros ya que perjudica a las fiestas de Moros y Cristianos de Villena. Increíble. Entonces en Pamplona qué sucede».
Asegura que el coso taurino no se ha limpiado desde la última actividad realizada en ella, y además apunta que «si alguien quiere visitar la Plaza de Toros como sucede en otras ciudades, habiendo una partida presupuestaria para ello, aquí no se hace. Es, pese a quien pese, un edificio emblemático de la ciudad.
En el vídeo que acompaña la noticia podrán escuchar de manera íntegra la rueda de prensa.
Francisco Javier Esquembre
Por otro lado, el Alcalde de Villena ha contestado a Miguel Ortuño. Ha comentado que ayer tuvo entrada la denuncia de la Peña Cultural Taurina Villenense. «Dicen que desde el ayuntamiento existe silencio administrativo. El consistorio tiene claro que cede un espacio municipal, pero que no habrá toros», ha manifestado.
Esquembre abandera la «legalidad», y le sorprende que la peña taurina «presente un contencioso administrativo. Deben de recapacitar si es bonito que acudan con sus hijos a una plaza de toros para ver morir a un animal».
Además, el primer edil va más allá. «No se acuerdan que hicimos toros sin poder hacerlos, ya que la plaza no reunía las medidas de seguridad necesarias. Se les escapó un toro, realizaron obras anómalas de cara a cuando sacan a los toros del camión. Parece que la peña taurina sabe más que yo, y se han hecho festejos taurinos con triquiñuelas».
Para concluir, Esquembre pide que «no se me acuse de un delito que no he cometido. En otras juntas de gobierno sí se cedió el espacio público. Tenemos el derecho de velar por la cesión de estos espacios, por lo que no creo que eso sea prevaricación«.