El festival arranca por todo lo alto, con una afluencia notable y ganas de fiesta sin fin
La séptima edición del festival Rabolagartija ha arrancado este jueves en Villena (Alicante) por todo lo alto, contando con el impresionante montaje que el fin de semana anterior acogía el festival Leyendas del Rock y poniendo sobre el escenario algunas de las actuaciones más esperadas por los miles de asistentes al festival, como La Pegatina, Talco o Los Chikos del Maíz.
Desde la apertura de puertas a las 17 horas la entrada fluía de manera constante, algo más retraída al principio y de forma masiva según avanzaba la tarde. En el interior del recinto, todo dispuesto para un evento que tenía el honor de abrir la propuesta de rap intimista de Lia Kali, seguida por otra descarga de rap, en este caso más combativa, de la mano de Lágrimas de Sangre.
Sin tiempo para respirar llegaban La Fúmiga, uno de los grupos valencianos más queridos gracias a su alegría y optimismo rebosante, y Boikot, que ponía patas arriba con sus clásicos de siempre un recinto que ya presentaba el primer lleno de la jornada y que de ahí en adelante se iba a convertir en un auténtico desenfreno de la mano de los Lendakaris Muertos y su punk gamberro y de los sevillanos Narco, otro peso pesado que ha vuelto al festival tras varios años de ausencia para alegría de sus seguidores, que son legión.
Mientras tanto, se sucedían las actuaciones en el Caparrilla Stage, el tercer escenario del festival, por donde desfilaban Pirat`s Sound Sistema, Los Ibiza, Cactus, Lèpoka y Senyor Oca, con dos descargas muy destacadas de Alademoska y Fuckop Family, que jugaban en casa y eso se nota.
Para todos los gustos
A las once y media de la noche, con la puntualidad marca de la casa, arrancaba el show de La Pegatina, 80 minutos de espectáculo que se pasaron en un santiamén gracias a una propuesta llena de ritmo y diversión y que venía a poner patas arriba (lluvia de confetis mediante) con su fusión de la rumba catalana, la cumbia y el ska a un público ya entregado y poseído por el espíritu de la fiesta, y que siguió disfrutando de lo lindo con otros dos pesos pesados: el rap crítico y comprometido de Los Chikos del Maíz y el trepidante ska de los italianos Talco, otro clásico de Rabolagartija.
Electrónicamente
La mezcla de reggae, ska y rap de la banda de Onteniente Auxili exprimía las reservas de los asistentes, que remataban la jornada, como es habitual en Rabolagartija, con una propuesta electrónica para hacer bailar hasta la extenuación a los festivaleros más intrépidos.
En esta ocasión a cargo de Dremen, colectivo formado por DJs, productores y músicos que mezcla a la perfección electrónica y hip-hop, consiguiendo unas sesiones monumentales que siempre sorprenden y divierten al público.
Fotografías: Salvador Villa
