La convocatoria, cuyo plazo de presentación de solicitudes está abierto hasta el próximo 12 de enero, aumenta un 290% su dotación económica.
La Diputación de Alicante reforzará en 2023 el apoyo a los ayuntamientos de la provincia para la prevención de incendios forestales a través de un importante programa de subvenciones dotado con 1.562.000 euros. La institución ha incrementado más de un 290% la cuantía económica de este plan, en el marco del compromiso adquirido tras el incendio de La Vall d’Ebo que este verano asoló gran parte de la zona.
«Además de las ayudas que pusimos en marcha de forma inmediata para ayudar a los municipios afectados por esta catástrofe, nos comprometimos a aumentar la partida destinada a prevenir incendios, tal y como hemos hecho con esta convocatoria abierta a todos los consistorios que impulsamos desde hace tres años», ha señalado el presidente de la Diputación, Carlos Mazón, quien ha recordado el elevado riesgo de incendios que existe en la provincia, especialmente durante los meses de verano.
La convocatoria, cuyo plazo de presentación de solicitudes ya está abierto y finaliza el próximo 12 de enero, contempla dos líneas de ayudas, tal como ha explicado el diputado del área, Miguel Ángel Sánchez; unade 62.000 euros para la redacción de Planes Locales de Prevención de Incendios Forestales o Planes Locales Reducidos de Prevención de Incendios Forestales y otra de 1,5 millones de euros para colaborar con los municipios en la ejecución de las medidas establecidas y programadas en dichos documentos, una vez que hayan sido aprobados por la Comunitat Valenciana.
En este segundo apartado se incluyen, en este sentido, la realización de actuaciones como el mantenimiento de pistas forestales y senderos homologados que permitan el acceso a los medios de extinción o puedan ser usados como vía de escape, la reparación de infraestructuras de prevención de incendios -conducciones de agua, depósitos o puntos de vigilancia-, la conservación de líneas de defensa -áreas cortafuegos, fajas auxiliares, etc.-, el desarrollo de actuaciones selvícolas de limpieza y la retirada de árboles dañados o enfermos -desbroces, podas, claras selectivas o triturado de residuos- o el mantenimiento de cultivos agroforestales y de áreas de baja carga combustible.
