El Alcalde y concejal de Hacienda, Francisco Javier Esquembre, anunció ayer la aprobación en Pleno de los Presupuestos Municipales para este año con los que Villena acabará con la deuda que arrastraba con el Plan de Pago a Proveedores.
Cuando el equipo verde llegó a la Alcaldía junto a PSOE y VCD en mayo de 2011 el Ayuntamiento de Villena se encontraba profundamente endeudado. En aquel momento las arcas municipales soportaban una deuda total de más de 20 millones de euros que actualmente han desaparecido gracias a la labor responsable del equipo de gobierno con el erario público.
Con la aprobación de los Presupuestos Municipales para el año 2016, el equipo de gobierno verde, quien desde hace un año gobierna en solitario en Villena, ha conseguido acabar con la deuda del Plan de Pago a Proveedores. Para ello se destinarán 1.200.000 euros a los que hay que sumar 4.245.000 euros que irán destinados al pago de la deuda que las arcas municipales mantenían.
Con este último pago la deuda municipal queda en 4.800.000 euros de lo que en 2011 eran más de 20.000.000 de euros. “En estos presupuestos hay más inversión que en ejercicios anteriores y hay optimismo de cara al futuro tras liquidar las deudas que asfixiaban al Ayuntamiento”, ha indicado el Alcalde.
Esquembre dejaba entrever la voluntad del equipo de gobierno de poder dedicar más dinero público a inversiones que ayuden a mejorar la ciudad, aunque se mostraba orgulloso por la responsabilidad de eliminar esta deuda, “sin ser el mejor presupuesto del mundo, es el mejor que se podía tener en estos momentos”, señalaba el edil en alusión a la obligación del Gobierno Central de amortizar deuda pendiente.
El Presupuesto Municipal para 2016 permitirá a Villena una inversión sostenible por un importe de hasta 1.600.000 euros. Los proyectos a destinar la inversión no pueden generar más gasto al ayuntamiento y deben ser sostenibles en el tiempo.
El equipo de gobierno verde, el cual ha reducido la deuda de 190 a 112 euros por habitante desde el año pasado, considera que estos presupuestos serán los últimos que irán centrados, como objetivo principal, a la reducción de la deuda pública.
El remanente destinado a inversiones sostenibles está siendo consensuado con los grupos de la oposición para abordar proyectos prioritarios en la ciudad, cuyos proyectos se aprueben y comiencen antes de final de año.
Desde el equipo de gobierno sorprende la postura, tanto del Partido Popular como del Partido Socialista, al haber votado en contra “unos presupuestos responsables” en los que se han generado puestos de trabajo “por primera vez en muchos años” y que permiten una inversión en la ciudad de más de un millón y medio de euros.