Estamos ya en en el mes de junio de 2024, y a la vista está como el alcalde Fulgencio Cerdán ni acertó en la primera que era que la obra de la Avenida de la Constitución finalizaría en mayo de 2023, ni en la siguiente “que las aceras estarían terminadas en Semana Santa” y visto lo visto, ni acertó con la tercera, cuando decía en aquella reunión con los comerciantes y ante los medios de comunicación “que las obras estarían terminadas finalmente en mayo de 2024”. De momento, seguimos sin fecha de finalización y las aceras sin estar finalizadas y el parque María Auxiliadora, que forma parte de la misma obra, paralizado desde hace meses; además de las mejoras que se tienen que aplicar en la primera fase de la Avenida.
Un motivo de este continuo incumplimiento es la lentitud del propio Ayuntamiento -denunciada por el PP en innumerables ocasiones.
La empresa que ejecuta estas obras solicitó el año pasado un primer modificado del proyecto, que el Ayuntamiento tardó 6 meses en resolver. En el Pleno en el que se aprobaba esa modificación -diciembre de 2023- el portavoz del Partido Popular, Miguel Ángel Salguero, solicitó al Equipo de Gobierno que tomase las medidas necesarias para garantizar que a partir de ese momento se iba a acelerar el ritmo de ejecución de la obra, y a priorizar y acelerar los trámites requeridos al Ayuntamiento.
En esa ocasión, se refirió también a la tramitación del modificado número 2 presentado por la empresa ese mismo mes de diciembre solicitando que no se tardasen “otros 6 meses”. Durante los próximos Plenos se ha ido insistiendo sobre este asunto.
Sin embargo, y al igual que ocurrió con la primera modificación del proyecto, han pasado 6 meses sin que el Ayuntamiento haya resuelto el modificado no2 del proyecto, aspecto por el que desde el Partido Popular se volvió a preguntar al concejal de obras en el último pleno.
De este modo, el PP lamenta que es el propio Ayuntamiento el que ralentiza las actuaciones de esta obra como ya hizo con la anterior solicitud y de todo ello se deriva un enorme perjuicio, cada vez más sostenido en el tiempo, a vecinos y comerciantes.