La tranquiliad llegó a la Panáfrica. Tras la durísima etapa del
miércoles, donde casi todos los pilotos se las tuvieron que ver y desear para
llegar a la meta de Zagora, tras encontrarse, kilómetro sí y kilómetro también,
con multitud de trampas en forma de fango y barro, sobre todo en el lago Iriki,
el equipo Aridex Sipu Racing volvió a apelar a la épica para recorrer los más
de 250 kilómetros que unían las ciudades de Zagora y Erfoud.

Miguel Arjona y Ricardo Martínez echaron mano de la estrategia para
afrontar la penúltima etapa de esta Panáfrica que languidece. La etapa ha sido
larga, con muchas zonas lisas que aparentaban una cosa y después aparecían las
sorpresas, negativas, eso sí. Tras las lluvias torrenciales de las últimas
horas, el terreno se encontraba muy blando, aunque esta vez, tanto el
petrelense como el villenense pudieron salir airosos, aunque tuvieron que
lidiar, utilizando el argot taurino, con zonas pedregosas, barrancos y llanuras
inmensas.

Tras tantos días de
carrera, y todo sea dicho, de penurias, los participantes no han querido
arriesgar, ya que sus respectivos vehículos llevan muchos kilómetros a cuestas
y una avería podría echar por tierra todo el trabajo conseguido. Es por eso que
Miguel y Ricardo han querido conservar la mecánica, ya que la etapa de hoy
viernes, la última, es de «toma pan y moja». Es por ese motivo por el
cual los alicantinos saldrán hoy a darlo todo y luchar hasta el final.

¿Qué se van a encontrar en el camino? Pues una etapa llena de arena
(tendrán que atravesar el desierto y las dunas de Erg Chebbi), en una carrera
de 190 kilómetros que tenía previsto que saliera y finalizará en Erfoud, ciudad
conocida con el nombre de «Puerta del Desierto del Sahara», un lugar
cinematográfico ya que en ella se han rodado películas como El príncipe de
Persia, La momia o Marchar o morir, pero que finalmente arrancará y concluirá
en la localidad de Hassilabied, pasando por Merzouga, un pequeño pueblo en el sureste de Marruecos, a
unos 35 kilómetros al sureste de Rissani y a unos 45 kilómetros de Erfoud.

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Merzouga es muy famosa por ser el único lugar en Marruecos
donde el desierto del Sahara tiene las famosas dunas, que son típicas de países
como Argelia, Túnez y Egipto, población que se encuentra dentro del desierto de Erg Chebbi, lugar que
aprovechaban los equipos que participaban en el mítico y desaparecido
París-Dakar. Con eso está todo dicho y se vislumbra la dureza con la que se
encontrarán los participantes en la última y más exigente etapa de la Panáfrica
2014.

Siguiendo con el séptimo arte, la mejor película que puede protagonizar el equipo
Aridex Sipu Racing es la de cruzar en primer lugar la línea de meta. Hay un
dicho que puede ejemplarizar con lo que están haciendo Miguel y Ricardo: “La
vida es como el ejercicio, cuanto más duro es, más duro te vuelves”.

La general está complicada (sería la primera vez en la Panáfrica que un
coche logra el triunfo final), el primer clasificado, el buggy de Nobi Sushi
les saca 18 kilómetros (sin penalizaciones serían 200 metros). Lideran la prueba en la categoría de coches, con 1.686,12 kilómetros, 33
kilómetros de ventaja sobre el equipo Marina d’Or. Lo logren o no, sin duda su
participación en esta épica prueba es digna de un Óscar. Mucha suerte
campeones.

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