El joven activista que está llevando a cabo la rehabilitación del Teatro Cervantes de la colonia de Santa Eulalia ha remitido un comunicado en el que desear aclarar que su intención es la de ‘realizar las obras bajo la estricta legalidad vigente’.
José P. manifiesta lo siguiente en su comunicado:
1. Los propietarios y poseedores de bienes del patrimonio cultural valenciano deben custodiarlos y conservarlos adecuadamente a fin de asegurar el mantenimiento de sus valores culturales y evitar su pérdida, destrucción o deterioro.
2. Cualquiera que tuviera conocimiento del peligro de destrucción, deterioro o perturbación en su función social de un bien del patrimonio cultural, o de la consumación de tales hechos, deberá comunicarlo inmediatamente a la administración de la Generalitat o al Ayuntamiento correspondiente, quienes adoptarán sin dilación las medidas procedentes en cumplimiento de la presente Ley.
3. Todas las personas físicas y jurídicas están legitimadas para exigir el cumplimiento de esta Ley ante las administraciones públicas de la Comunidad Valenciana. La legitimación para el ejercicio de acciones ante los tribunales de justicia se regirá por la legislación del Estado.
4. La Generalitat Valenciana fomentará el marco de colaboración con asociaciones de voluntariado para la conservación y difusión del patrimonio cultural valenciano.
Por lo establecido en el presente artículo queda meridianamente claro que como dice en el punto dos: “Cualquiera” puede poner en conocimiento de la Generalitat o al Ayuntamiento correspondiente la situación de destrucción, deterioro o perturbación de un bien de patrimonio cultural cosa que se está haciendo, pero para más inri, en su punto 3 establece que si una persona física está legitimada para exigir el cumplimiento de esta ley cuanto más una persona jurídica como es el Ayuntamiento de Sax. Siendo el punto 4 de suma importancia ya que se pretende contar con asociaciones de voluntarios para conservar nuestro querido Teatro.
Volviendo a insistir en esto, nunca fue nuestra intención saltarnos la legalidad vigente por eso seguimos en nuestro empeño de salvar el Teatro ya que como vemos en esta ley en la que se ampara nuestro consistorio, tenemos amparo legal para poner en conocimiento el estado del Teatro.
Pero es que podemos seguir: en el artículo 9 de dicha ley se establece:
1. Los poderes públicos garantizan la protección, conservación y acrecentamiento del patrimonio cultural valenciano, así como el acceso de todos los ciudadanos a los bienes que lo integran, mediante la aplicación de las medidas que esta Ley prevé para cada una de las diferentes clases de bienes.
2. La acción de las administraciones públicas se dirigirá de modo especial a facilitar la incorporación de los bienes del patrimonio cultural a usos activos y adecuados a su naturaleza, como medio de promover el interés social en su conservación y restauración”.
Y a partir de la lectura de este artículo, lanzo una pregunta al aire: ¿Qué se ha hecho en los últimos 50 años para conservar y restaurar el teatro? Obviamente nada, o si no el escenario no se habría derruido.
Así que señores integrantes del Ayuntamiento, reiteramos nuestra petición de salvar el teatro desde la legalidad vigente y trasladarles nuestra voluntad de remar en el mismo barco con un fin común: “Salvar el Teatro.