La
Guardia Civil ha detenido a tres miembros de un grupo criminal, a
quienes se les imputa la autoría de 25 robos en vivienda (21
cometidos en Novelda, 2 en Cantabria y 2 en A Coruña), así como
también la comisión de los delitos de falsificación de documento
público, falsificación de documento privado, usurpación de estado
civil y pertenencia a grupo criminal.
En el mes de febrero
del pasado año 2018 se produjo, en la localidad de Novelda, un
importante robo en un chalet en el que tres varones sustrajeron,
entre joyas y efectivo, cerca de 80.000 euros. Del mismo modo,
durante ese mismo mes de febrero y marzo, se produjo un repunte
significativo de esta misma tipología delictiva, es decir, de robos
en viviendas unifamiliares, en las partidas noveldenses de Los
Molinos y Ledua, hasta sumar un total de veintiún hechos
contabilizados.
Los agentes del Área
de Investigación de la Guardia Civil de Novelda, en colaboración
con agentes del Equipo Contra el Crimen Organizado (ECO) de la
Comandancia de la Guardia Civil de Alicante, dieron comienzo a las
gestiones tendentes al esclarecimiento de dicho repunte.
Fruto de las múltiples
pesquisas y del exhaustivo análisis de las diferentes informaciones
que se iba obteniendo, se consiguió averiguar las identidades de los
integrantes del grupo criminal investigado, logrando localizarles.
Igualmente, los investigadores pudieron probar también, que estas
personas habían cometido, al menos, otros cuatro robos en viviendas
sitas en otras provincias, ocurriendo dos en Cantabria y otros dos en
Galicia.
Como resultado de la
operación, el pasado mes de septiembre del año en curso se
procedió, en las localidades alicantinas de Orihuela, San Miguel de
Salinas y Novelda, a la localización y detención de tres hombres,
de origen moldavo y ruso, de 59, 36 y 35 años de edad, por la
comisión de los presuntos delitos de pertenencia a grupo criminal,
robo con fuerza en vivienda, usurpación de estado civil,
falsificación de documento público y falsificación de documento
privado.
Cabe destacar la enorme
dificultad que ha entrañado, para los agentes investigadores,
averiguar la identidad y el paradero de los detenidos, dadas las
múltiples medidas de contra-vigilancia que éstos tomaban, así como
el hecho de que, para cometer los robos, utilizaban vehículos con
placas de matrícula falsificadas, impidiendo así su posible
identificación, por parte de testigos o cámaras de seguridad.
Los tres detenidos han
quedado en libertad con cargos, a la espera de juicio, con la
obligación de comparecer ante la Autoridad Judicial cuando sean
requeridos para ello.
