En el apartado de ruegos y preguntas del pleno celebrado en Caudete el pasado jueves, volvió a salir otra vez la liebre justo en la pregunta de: ¿Para cuando, señor Alcalde, un coche nuevo para la Policía Local ya que el actual no es seguro? El Alcalde salió por peteneras metiéndole caña a la policía para justificar por qué no lo ha comprado.
«Es cierto -dijo- que nos comprometimos y se va a comprar pero siempre que cambien el trato que le dan a los coches. Los rompen tres veces cada media hora y en estas condiciones no les voy a comprar uno nuevo. El que lo rompa…¡que lo pague!. Ya lo teníamos visto y ese mismo día vi hacer dos jugadas a dos policías con el coche y cambié de opinión».
¡No! No creo que esta respuesta sea la mejor manera para ir solucionando los problemas, es decir, aireando este tipo de hechos que es su palabra contra la de ellos. ¡No le pida después confidencialidad y sigilo a la oposición!
Un Pleno, que debía haber durado cuarenta minutos, se alargó innecesariamente..¡cuatro horas! Les recomiendo a todos, incluído al árbitro, o sea al Alcalde, que visualicen la sesión para que comprendan por qué mucha gente cambia de canal y se pasa a ver una película. Y eso, créanme, no les beneficia a ninguno de ustedes…
¡Ni a los caudetanos tampoco!. Por mucho Reglamento de Organización Municipal (esta fue la primera Moción que se aprobó) que se dote la Corporación, si no hay un mínimo de respeto entre los contendientes de los distintos grupos políticos…¡no hacemos nada!. Estar tirándose constantemente los trastos a la cabeza no da buena imagen. El Reglamento que les recomiendo es el que aplican los jugadores de Rugby: tienen como norma no insultarse entre ellos. ¡Y la cumplen!, sin renunciar a pelear para ganar el encuentro.