El domingo por la mañana me encontré enfrente del Colegio del Paseo esta señal por los suelos. No es la primera que veo esta situación. Pensé que lo mismo se había caído ella sola por falta de mantenimiento a la altura de una soldadura mal ejecutada.
Me incliné más porque se tratara de un acto vandálico ante una apuesta entre jóvenes para ver quien la hace más gorda. Y siempre dando gracias, porque pudo ser más grave la cosa.
Nosotros también fuimos jóvenes. Bebíamos alcohol, por supuesto. Pero no nos daba por acosar a las señales o al mobiliario urbano. Entonces, y por estas fechas, solía arder la mies en las eras. Y siempre era el mismo al que se le acusaba de provocar el fuego…. ¿se acuerdan?
Cada época tiene sus cosas. Pensamos que con la llegada de la Democracia ciertas conductas mejorarían. Estábamos en un error. En vez de mejorar… se han agravado. Y de qué manera. En el caso de laseguridad ciudadana…¡qué quieren que les diga que ustedes no sepan o sufran!.
¿Lo que más cuesta de llevar de esta película?. Me lo contaba indignado el otro día un vecino: «que cuatro niñatos, conocedores de la Ley del Menor, te rayen el coche y encima se molestan si les riñes provocándote e insultándote al saber que, por la edad, llevan las de ganar. ¡El colmo!.»
También es cierto que, de forma tan descarada como ocurre aquí, no pasa en ningún pueblo de los alrededores….Hay que ver la forma de reconducir esta situación…. ¡A nadie que le pase!