Las siete de la mañana y fresquito (-1 grado). Aviana comenzó su
quincenal actividad de senderismo, trasladándose en autobús hasta
la ciudad de Enguera. En total fuimos 62 socios los que madrugamos
para pasar un día completo por los extensos montes de Enguera.
El
trayecto dibujó un ocho sobre el terreno, recorriendo los barrancos
del Gatillo en primer lugar y el de la Carrasca a continuación,
pudiendo contemplar los impresionantes abrigos naturales que la
erosión ha construido sobre la piedra caliza en dichos barrancos. En
ambos trayectos, debido a la exigencia del terreno, se sorteó
algunos tramos entretenidos que ralentizaron la marcha debido al
numeroso grupo.
En
la fuente de Peñarroya al abrigo de una impresionante formación
rocosa, hicimos una parada para el almuerzo, comprobando que el buen
ambiente de Aviana sigue estando presente, al tiempo que se
comentaban las incidencias ocurridas en el barranco del Gatillo.
Particularmente,
en el fondo del barranco de La Carrasca y sobre mediodía, nos
encontramos con hielo en el suelo que dificultó algún paso que
otro, sorteándolo gracias al ingenio de nuestros compañeros. Es
especialmente interesante la vegetación que tapiza la cara norte de
dicho barranco, con abundantes especies de durillo (Viburnus
tinus), roble valenciano
(Quercus faginea),
lentisco (Pistacea
lentiscus), zarzaparrilla
(Smilas aspera),
rusco (Ruscus aculeatus),
aparte de madroños, encinas, pino carrasco, hiedras, madreselvas,
etc., que formaban un gran manto vegetal sobre la ladera.
Ya
en el autobús y antes de iniciar el regreso hicimos un alto para la
comida, con la satisfacción de haber pasado un día en muy buena
compañía y en contacto con la naturaleza. En total fueron 14 km.
recorridos en esta sorprendente e impresionante ruta por la sierra de
Enguera con una temperatura ideal para la práctica del senderismo en
esta época del año.