La Guardia Civil de la Región de Murcia desarrolló la operación ‘Amedio’, una investigación dirigida a esclarecer el origen, la tenencia y el uso con fines de lucro de un mono tití durante las fiestas del Carnaval de Águilas, que se saldó con la tramitación de varias denuncias por presuntas infracciones administrativas relacionadas con la tenencia ilegal de especies protegidas a su poseedor y con la incautación del animal.
La investigación se inició cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento de que en una vía pública de la localidad de Águilas, una persona se encontraba exhibiendo un mono tití (‘Cercophiecus Talapoin Ansorge’) aprovechando la afluencia masiva de personas que, con motivo de la celebración de las fiestas de Carnaval, se encontraban en el municipio. Al parecer, su poseedor utilizaba al primate para cobrar a aquellos que quisieran fotografiarse con él y obtener una copia de la imagen.
Guardias civiles del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), en colaboración con agentes de la Policía Local de Águilas y veterinarios municipales, localizaron al animal y a su poseedor al que le solicitaron la documentación necesaria tanto para su tenencia como para llevar a cabo la citada actividad lucrativa, lo que no pudo ser acreditado, por lo que se confeccionaron y tramitaron varias denuncias administrativas.
La Benemérita se incautó del primate que, después de ser puesto a disposición de la administración pública, fue entregado en el centro de recuperación de animales de la Fundación Primadomus de Villena dedicada, entre otros fines, a la recuperación y reinserción de los animales en su medio natural.
Se trata de un espécimen de mono tití (‘Cercophiecus Talapoin Ansorge’) endémico de Brasil, cuyo cuerpo mide entre 18 y 25 cm de longitud y su cola entre 28 y 35 cm y pesa entre 400 y 450 gramos. Debido a las dimensiones, es habitual objeto del tráfico de especies protegidas para su venta a modo de mascota.
La tenencia y la crianza de primates por particulares en España están prohibidas y limitadas a fines de educación, conservación de las especies o investigación científica a organismos, institutos o centros oficialmente autorizados. Su comercialización sin control puede causar la disminución de su población y ocasionar graves riesgos para la salud humana por transmisión de enfermedades.