El vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado, se reunió ayer con el consejo de dirección de su partido en la Comunitat Valenciana para asegurar que el futuro Gobierno popular de la nación está «comprometido» con el cambio de un modelo de financiación autonómica, que «no le va bien» a la Comunitat, así como con el desarrollo del Corredor Mediterráneo.
Casado destacó que el cambio de modelo de financiación está incluido tanto en el pacto al que han llegado con Ciudadanos y Coalición Canaria para la investidura de Mariano Rajoy, como en las propuestas planteadas al PSOE. Asimismo, afirmó que el PP está «muy comprometido con el desarrollo del eje mediterráneo», algo que «ya se ha hecho en materia de aeropuertos, puertos, autopistas y autovías», y ha defendido que es necesario «ampliar la red de comunicación ferroviaria».
Recordó que con el PP «se proyectó y culminó una obra fundamental como el AVE y también las infraestructuras portuarias y aeroportuarias», y aseguró que hay que seguir avanzado con el Corredor Mediterráneo, en el que hay «más de 5.000 millones invertidos».
Casado destacó que el PP es el partido que «más ha hecho por la Comunitat», y defendió el proyecto de la formación en esta región, frente «al radicalismo de partidos que, como en la Alcaldía de Valencia o la Generalitat, están en debates identitarios y de ideologías trasnochadas que no han creado prosperidad ni empleo».
Calificó de «decepcionante» la labor del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que se está «dando de bruces contra el muro de la realidad» porque «por mucho que prometas lo impagable y lo imposible, si no sabes gestionar es difícil que puedas mejorar la vida de tus vecinos». «Tenemos que volver a las instituciones y eso es en lo que estamos trabajando», afirmó el vicesecretario popular, quien ha asegurado que la dirección nacional del PP «tiene como una prioridad absoluta al PP de la Comunitat Valenciana».