El día de ayer nos enteramos de un hecho que ha dejado estupefacta a la Asamblea Lila de Alicante. Una pareja de chicas se estaba besando, cuando un coche comienza a tocar el claxon y a hacerles gestos cada vez que se besaban. Esta escena acabó con una mirada de desprecio y un «¡ya podríais daros dos besos en la cara!». Podéis leer el artículo entero en este mismo periódico.
¿Qué diferencias existe entre que se besen un hombre y una mujer con que se besen dos mujeres? Porque tenemos por seguro que si esta pareja hubiera sido heterosexual, la escena no se habría producido. Por desgracia, siguen existiendo personas que se meten en la vida de los demás, pensando que lo que ellas piensan que está bien y mal, ha de regir a todos por igual. En este caso, ha sido sobre la orientación sexual de otras personas, tema que compete solo a ellas, pero se presenta en otros muchos temas.
Esta escena, que algunos tildan de no tener importancia, se podría considerar delito de odio, que tienen lugar cuando una persona ataca a otra y la elige como víctima en función de su pertenencia a un determinado grupo social, según su género, identidad de género, discapacidad u orientación sexual entre otras. “Los que provocaren a la discriminación, al odio o a la violencia contra grupos o
asociaciones, por motivos racistas, antisemitas … su sexo, orientación sexual, enfermedad o minusvalía, serán castigados
con la pena de prisión de uno a tres años y multa de seis a doce meses” explicita el Código Penal.
Estos comportamientos recriminables se eliminan con educación en la igualdad y en el respeto, y conociendo las diversas sexualidades que son tan válidas como las demás. Quiero mandar nuestro total apoyo y ánimo a esta pareja. Haremos todo lo que esté en nuestra mano para que no vuelva a ocurrir.