Querido vecino, querida vecina:

Este domingo día 28 tenemos un compromiso con nuestra ciudad. Depende de todos nosotros elegir qué Villena queremos. Una Villena apática, conformista y resignada a perder protagonismo; o una Villena renacida y en busca de un nuevo porvenir. La nostalgia de lo que fuimos debe ser motor de impulso de lo que queremos ser. Somos un pueblo orgulloso de su pasado y un leal ejemplo de gran comunidad, y lo somos gracias sobre todo a nuestra ubicación entre tierras valencianas, murcianas y castellano manchegas. De esta condición histórica nace nuestra hospitalidad y nuestro espíritu comerciante. Y deseo que estas particularidades sean eje de nuestro futuro.

Soy joven e idealista y sueño con una Villena repleta de oportunidades y ejemplo de superación. Con una Villena con ambición y deseos. Con una Villena activa y atractiva, para vivir y para invertir. Sueño con una Villena que defienda todas sus riquezas, las patrimoniales y las medioambientales. Somos un pueblo convencido de nuestro carácter amistoso y trabajador y que nunca ha hecho de sus diferencias un obstáculo insalvable. Estamos a las puertas de una nueva era que necesitará ciudades con atrevimiento en sus decisiones y voluntad de ejecutarlas sin titubeos para no ser engullidas por el éxodo poblacional. Por eso es importante saber que lo que hagamos en los próximos años dependerá, en gran medida, el futuro de esta ciudad. De si seremos capaces de fomentar y atraer a gente emprendedora y grandes empresas o si terminaremos asumiendo que nuestros hijos e hijas se deban marchar fuera a ganarse la vida porque nuestra ciudad no les ha dado esa oportunidad. 

Hemos trabajado en un proyecto que busca no ganar las elecciones sino Activar Villena; porque mi sueño no es ser alcalde, mi sueño es transformar Villena. La victoria el día 28 no será el cambio que ambicionamos en sí mismo, sino la oportunidad para que se produzca ese cambio.

Hemos presentado este proyecto (que puede conocer en la web www.activarvillena.com/programa) con la intención de dar respuesta a los problemas que enfrenta nuestra ciudad, -con actuaciones a corto plazo y fijando el crecimiento de la ciudad para los próximos años con un modelo de ciudad definido- y con la ambición de que sea un proyecto que represente a una mayoría de nuestros vecinos. Porque no es una opinión política interesada el decir que las instalaciones deportivas están desfasadas y saturadas, que los jóvenes carecen de una oferta de ocio, que falta suelo industrial o que las calles están más sucias que nunca, es una realidad. Al igual que las empresas y particulares necesitan más agilidad para que el Ayuntamiento no tarde años en resolver sus licencias bloqueando así el crecimiento de Villena.

Por eso se trata de Villena y no de política, porque nos jugamos algo más que un simple reparto de poder entre unos u otros. Se trata del futuro de una ciudad que pertenece a las próximas generaciones. Y nuestra obligación es dejarles la mejor ciudad posible, con el apoyo, conocimiento y visión de nuestros mayores. Este domingo, por consiguiente, ejerceremos nuestro derecho a voto, cumpliendo así también con nuestra obligación con el porvenir de esta ciudad.

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La antorcha pasa ahora a una nueva generación, que no está dispuesta a seguir presenciando el lento deterioro de su tierra, que ha decidido romper con el mito de apatía de su generación y que destinará todo su esfuerzo para que Villena vuelva a convertirse en el centro de una comarca emprendedora e innovadora. Para que vuelva a ser ciudad de conexión y el punto desde donde nacen las arterias que unen el Mediterráneo con el resto del territorio nacional.

Para este empeño necesitaré su ayuda. Construyamos juntos el futuro de Villena.

Atentamente,

Miguel Ángel Salguero 

Candidato a la alcaldía de Villena

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