El día 14 de abril de 2024, después del parón de las pascuas, ha transcurrido, para 55 socios y socias de AVIANA, entusiastas de la montaña, como una jornada llena de naturaleza y camaradería
Salimos a las 7:00 horas desde nuestro punto de encuentro habitual con el sol asomándose tímidamente por el horizonte y prometiendo un día radiante. Nuestra meta del día era ascender a las dos cimas más occidentales de la Sierra de Crevillente: el “Pic de Sant Gaietà”, también conocido como El Picacho o Picatxo, de 816 metros de altura y el “Alt de Sant Juri”, de 811 metros de altura.
Dejamos el autobús en el aparcamiento del área recreativa “La Cuesta” muy cerca del pueblo de Hondón de las Nieves y comenzamos rápidamente la subida al Picacho; ha sido una subida dura y constante con piedras sueltas en su parte media.
Por el camino nos hemos encontrado un mirador desde el cual se podía divisar Crevillente, Catral, Guardamar, y una amplia extensión de terreno.
Un poquito más adelante hemos tenido la oportunidad de asomarnos a la sima del bandolero Jaime Alfonso el Barbudo, una grieta estrecha pero muy alta que da entrada a la cueva. Esta cueva tiene más de 20 metros y hay que ir con cuidado y sobre todo con luz, ya que dentro es muy oscura. La sima acaba en una zona de escalones que bajan muy empinados por lo que no nos hemos adentrado demasiado.
Para seguir la ruta volvemos sobre nuestros pasos hasta llegar otra vez al mirador desde donde continuamos la ascensión en dirección a la cima del Picacho. Este tramo, de unos 2 kilómetros de subida, es duro, pero sin complicación si no se lleva un ritmo muy rápido.
Poco antes de llegar a la cima hemos parado a almorzar disfrutando doblemente: de los alimentos y de unas vistas espectaculares de las Sierras de Callosa y Orihuela, por nombrar algunas montañas del entorno.
Después del almuerzo hemos coronado la espectacular cima del Picacho que nos ofrece vistas de La Vella (838 metros), el Parque Natural de El Hondón, la Vega Baja del Segura y el litoral. En días despejados incluso se alcanza a ver la Sierra de Cartagena y las islas del mar Menor.
Después de algunas fotos para inmortalizar el momento, hemos iniciado el descenso y nos hemos dirigido al cerro de San Juri, desde ahí hasta el final todo es bajada por pista y sendero hasta llegar de nuevo al punto de origen, el área de San Cayetano.
La distancia recorrida ha sido de casi 12 kilómetros, con un desnivel de 524 metros y una dificultad moderada.
La ruta a estas cimas en la Serra de Crevillent ha sido mucho más que una simple caminata; ha sido un viaje de descubrimiento, conexión y admiración por la belleza del mundo que nos rodea. Agradecemos a las personas que preparan las rutas, por hacer posible esta experiencia y a todos los participantes por su compañía y espíritu aventurero.